Un Polinomio en Nueva York
En un reciente viaje a Nueva York, participamos en un taller organizado por los artistas Geraldine Juárez y Adam Bobbette, en el centro EYEBEAM de Arte y Tecnología del barrio de Chelsea, en Manhattan. Con un equipo internacional y multidisciplinar en el que encontramos entre otros al israelí Amitai Yaish y al estadounidense Alexander Reben, tratamos de crear una máquina que convirtiese la basura en comestible, -The Edible Excess Machine-. irradiándola con luz láser difractada, mientras un viejo televisor cantaba Waste it and Taste it (Deséchalo y pruébalo)
En este vídeo de Lou Knox se pueden ver el proceso de producción y el resultado.
Tras mucha electrónica y sentido del humor, volvimos a casa y descubrimos que esa idea ya se comercializa en los supermercados en forma de palitos de cangrejo, surimi o txaka, que están hechos de desechos de pescado. Y tan ricos, oye.
